SINOPSIS de la presentación sinestésica “El arte que rima”
Por Carmen del Puerto, periodista y escritora
Facultad de Ciencias de la Información, Universidad Complutense de Madrid (UCM). Viernes, 15 de noviembre. 13h
A un artista francés llamado Yves Klein le dio por pintar los árboles de azul. De un azul eléctrico, intenso y monocromo, pero con matices, que me inspiró mi primera antología poética con etiqueta “vintage”. La pintura del loco del pelo rojo se llenó de “Soles amarillos”, aunque no todos fueran estrellas y brillaran por fusiones termonucleares, sino por fotosíntesis. Astros rutilantes que dieron título a mi segunda colección de poemas sobre obras de grandes artistas, tras el experimento y pasatiempo poético iniciado en “Azul ultramar”. Anteriormente, en mi obra de teatro “El honor perdido de Henrietta Leavitt”, el arte me ayudó a ilustrar su puesta en escena, que contó con una escenografía expresionista de todo un artista, Diego Giuliano. Mi libro de divulgación científica “Especies cósmicas” contiene imágenes astronómicas: hoy por hoy, la Astrofotografía es un arte con mayúsculas. Los textos de “La niña de Lambaréné y otras escenas africanas” se acompañan de fotos de mis viajes: el arte que envuelve al continente africano. Arte también son las ilustraciones de mi cuento infantil “Maryola y la estrella de mar”, de la excelente diseñadora Miriam Cruz. Con mi novela “El finlandés errante” descubrí el impresionante arte finlandés, y con “Memorias de una hetaira”, el arte griego, cuya iconografía deviene en argumento. Mi último libro, “Estos niños NO existen”, se ilustra con arte generado por mi hija Laura Porras con un programa de inteligencia artificial.
Soy una periodista con una singular vocación literaria que ama el Arte, la Historia, el Cine, la Música y la Ciencia. Confieso que me gustan las simbiosis. Esta presentación “sinestésica” es una prueba de ello.
Un honor añadido a esta entrañable experiencia: algunas de mis obras se venden en su librería Fragua de la Facultad de Periodismo de la UCM.